Así lo declaró ayer a VANGUARDIA Óscar Pimentel González, coordinador de Atención a Emergencias y de Cuencas Nacionales de la Comisión Nacional del Agua.
Saltillo.- Debo, no niego; agua, no tengo. Ni en este 2013 en que se espera una aguda sequía, ni el 2014, cuando las condiciones serían prácticamente las mismas, México estaría en condiciones de abonar a la deuda de agua que tiene con Estados Unidos, y que debe cumplir con trasvases desde las presas en Coahuila.
Así lo declaró ayer a VANGUARDIA Óscar Pimentel González, coordinador de Atención a Emergencias y de Cuencas Nacionales de la Comisión Nacional del Agua, quien informó que ya se informó de ello a las autoridades estadounidenses.
“Hace unos días se tuvo una reunión con la CILA (Comisión Internacional de Límites y Aguas) en Chihuahua, y nuestra postura es que no tenemos el agua suficiente para pagar los adeudos que tenemos con Estados Unidos”, dijo.
El funcionario federal señaló que desconoce el monto anual que se debe pagar de agua a Estados Unidos, y cuál es el adeudo total que se tiene por retrasos en el pago.
Desconoce cuánto se debe
Pimentel González no reveló la cantidad de agua que se debe al vecino país ni tampoco dio a conocer, argumentando desconocer el dato, cuál es la cuota anual que se paga a Estados Unidos.
“No tengo las cifras, pero nuestras presas están entre el 55 y el 60 por ciento de su capacidad, y este es un tema natural, y si no ha llovido no tenemos el agua necesaria para pagar”, explicó.
“No desconocemos los convenios internacionales”, aclaró, “pero se habrán de pagar conforme tengamos disponibilidad, y no queremos que este tema se convierta en un motivo de diferendo, sino que prive el diálogo basados en las condiciones naturales que se están dando en esta parte del ciclo, por las condiciones climatológicas, y por el propio cambio climático”.
El también coordinador nacional de delegaciones de Conagua dijo que, por todo lo anterior, deben adoptarse medidas específicas en las políticas públicas en materia de agua, especialmente si se espera sequía este año y en 2014, de tal manera que si después se registra un buena precipitación, habrá condiciones para pagar.
“Sabemos que la obligación de cubrir anualmente los pagos de agua a Estados Unidos surgen de un Tratado Internacional firmado en 1944, el cual sigue vigente y debemos de respetar, pero ajustados a las actuales condiciones de la escasa precipitación, pues debo, no niego; agua, no tengo”, concluyó.