De consolidarse el proyecto hidroeléctrico que tiene previsto Grupo México en los límites entre Puebla y Veracruz, el municipio de Hueytamalco solamente recibiría el 10 por ciento del caudal de los ríos que actualmente cruzan esta región.

La empresa minera tiene prevista la colocación de al menos tres plantas hidroeléctricas en el río Jalacingo, perteneciente a Veracruz, el cual está unido a los ríos Atzala y Nautla.

Estos afluentes alimentan la región de Hueytamalco, pero con la construcción de presas hidroeléctricas y el entubamiento de tramos de los ríos, el municipio solamente captaría el 10 por ciento del agua que recibe hoy en día, reportó Rubén Espinoza Ramíres, representante del Grupo Cívitas Teziutlán A.C.

El proyecto en sí afectaría de manera directa a Hueytamalco, y a los municipios veracruzanos de Jalacingo y Tlapacoyan.

Tan sólo en el territorio poblano serían seis mil campesinos que sufrirían esta disminución en los caudales de los ríos, detalló el activista.

La empresa no ha tenido acercamientos con las personas y ha tomado estas decisiones de manera unilateral, sin pensar en las afectaciones ambientales o sociales que podrían generar, añadió.

Por su parte, Agustín Guzmán Cantorena, habitante de Jalacingo, indicó que desde 2009 se presentó una controversia constitucional ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación en relación con los permisos que habían sido entregados para este proyecto hidroeléctrico, con lo cual se detuvo temporalmente éste.

Sin embargo, hace unos meses Grupo México presentó por segunda ocasión el proyecto ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Comisión Nacional del Agua (Conagua), por lo que ya cuenta con autorización de parte de la federación para la explotación de los ríos de la zona.

El ayuntamiento de Jalacingo aún no ha entregado los permisos, pero con el proceso electoral en puerta la empresa comenzó a presionar a los habitantes del municipio, bajo el argumento de que una vez que se dé el cambio de administración municipal se iniciará el proyecto.

Mientras esto sucede, los pobladores ya presentaron un amparo para evitar la explotación del río, pues esto afectaría a los demás pueblos de la zona entre Puebla y Veracruz.