Veracruz, Ver.- Pasaron ya 10 años desde que inició el Programa de Saneamiento de la Bahía de Veracruz y todavía no existe una fecha para finalizar los trabajos que pretenden evitar que las aguas negras de la ciudad terminen en el mar o en los afluentes cercanos.

Fue en 2003 cuando el Gobierno Federal, el Gobierno del Estado y los gobiernos municipales de Veracruz y Boca del Río iniciaron el llamado Programa Integral de Saneamiento de la Bahía de Veracruz, que debió concluirse en 2010.

Tres años después siguen sin tratarse la totalidad de las aguas negras producidas en la conurbación y, en consecuencia, millones de litros de aguas residuales continúan siendo arrojados a los cuerpos de agua cercanos y al mar.

De acuerdo a Gaspar Monteagudo Hernández, regidor con la comisión de medio ambiente, en el municipio de Boca del Río, hasta la fecha hay un avance del 70 por ciento en los trabajos proyectados hace 10 años.

No obstante, durante esa década la ciudad creció de forma vertiginosa, lo que provocó que el proyecto inicial quedara desfasado y fuera necesaria una actualización, la cual no se realizó, apuntó el edil.

Monteagudo Hernández añadió que aunque la infraestructura es mejor a la que existía hace una década, esta no está siendo utilizada, pues la mayoría de las plantas de tratamiento no están funcionando en toda su capacidad.

“De nada sirve toda la inversión que se ha hecho y que exista un avance en cuanto al tema de infraestructura cuando la operación está fallando, el Sistema de Agua y Saneamiento está manteniendo muchas plantas sin operar debido a la mala administración que existe, no tienen recursos para pagar lo que se necesita para operarlas”, opinó el regidor.

A finales de enero de este año, el gobernador Javier Duarte de Ochoa inauguró la remodelación de la planta de tratamiento norte del Sistema de Agua y Saneamiento, con la que, dijo, dejaban de ser arrojados al mar mil 600 litros de aguas residuales  por segundo.

No obstante, a meses del corte del listón, todavía puede observarse que las aguas que corren por el canal al que la planta escurre sus descargas son de color grisáceo y con olores fétidos, muy distante del agua transparente que el mandatario presumió durante el acto inaugural.

En Boca del Río también puede observarse el derrame de aguas negras crudas hacia el manglar de Arroyo Moreno. La construcción de la planta de tratamiento de La Tampiquera está retrasada y esto provoca que 250 litros de agua sucia sean arrojados cada segundo al manglar.

“La planta de La Tampiquera es un ejemplo de las obras que se dejaron de hacer o que quedaron olvidadas, ahí se siguen derramando aguas negras crudas al manglar, que finalmente terminan desembocando al mar”, apuntó Monteagudo Hernández.

Hasta la fecha no ha quedado concluida la segunda etapa del programa de saneamiento de la Bahía de Veracruz, con la que el gobierno busca tratar hasta el 85 por ciento de las aguas residuales y continúa la espera del inicio de la tercera etapa, con la que pretenden llegar al 100 por ciento.

La segunda etapa debió ser finalizada en 2007, de acuerdo a datos de la Comisión Nacional del Agua, organismo que estima que actualmente el 40 por ciento de las aguas de la ciudad no son tratadas por la falta de colectores y plantas de tratamiento.