La Paz, Baja California Sur (BCS). El director de la Región Pacífico Norte y Península de Baja California de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), Benito Bermúdez Almada, señaló la necesidad de crear un acceso más amplio que, por ende, permita mayor flujo de agua para alimentar al estero Palmira, manglar ubicado en El Esterito.

Las declaraciones surgen luego de los señalamientos de la activista ambiental, Carmina Valiente, quien mostraba su preocupación por la posible eliminación de la alcantarilla, debido a los trabajos del Programa de Reconstrucción con Concreto (Preco) de la Secretaría de Planeación Urbana, Infraestructura y Ecología (Sepuie).

La Conanp es, en México, la autoridad encargada de proteger algunos esteros y manglares protegidos en el listado de la Convención Internacional Ramsar.

“Debemos asegurar que se abra la calle para poder trabajar con las autoridades para que exista un flujo mayor, porque el flujo es intermitente, necesitamos un volumen más grande”, expresó el funcionario federal ante las obras de reencarpetado que se efectúan en el área.

La poca cantidad de agua que circula por el deteriorado desagüe podría a provocar una afectación a corto plazo, señaló.

Bermúdez Almada aceptó que el crecimiento poblacional de la ciudad de La Paz ha creado una presión en los frágiles ecosistemas en sus inmediaciones. 

“Debemos garantizar un flujo de agua mayor y más acciones de reforestación en el sitio”, explicó. Actualmente, el gobierno del Estado junto con la Comisión Nacional Forestal (Conafor) trabajan para sembrar más vegetación.

Los manglares son una formación vegetal leñosa, densa, arbórea o arbustiva de 1 a 30 metros de altura, compuesta de una o varias especies de mangle y con poca presencia de especies herbáceas y enredaderas. Las especies de mangle que lo componen son de hoja perenne, algo suculenta y de borde entero, de acuerdo con organismos oficiales como la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y el Instituto Nacional de Estadística.

En México existen 886 mil 760 hectáreas de manglares, de las cuales cada año desaparecían casi 10 mil hectáreas.