Rodolfo Gutiérrez
Ramos Arizpe, Coah.- Como consecuencia de la prolongada sequía que se manifiesta en la región, la presa de El Tulillo, en el ejido Hipólito, suma ya dos años sin captar líquido, lo que representa un problema tanto para ganaderos, agricultores y, en estas fechas, para los pobladores de comunidades cercanas.
Es que, según comentó Raúl Marines González, representante de los ganaderos de la sierra de la Paila, este vaso captador era también un atractivo turístico para los habitantes de Saltillo y Ramos Arizpe, quienes cada año visitaban el sitio en Semana Santa para divertirse.
“La presa está considerada como un lugar turístico y, desafortunadamente, no hay agua, no va haber recreación, aparte de que no habrá recursos económicos para el ejido Hipólito. La gente vendía de todo, refrescos, enchiladas, menudo y se ponía muy bien porque llegaban más de mil, mil 300 carros”.
Recordó que los paseantes acostumbraban pagar una cooperación para los encargados de la presa, ya que existía la posibilidad de que las personas acamparan durante toda la semana, o bien, únicamente los días santos.
“Es por la seca del 2011 que se acabó la presa, ese año llovió un poco y hasta hace unos dos meses se secó completamente, son dos años seguidos que nos pasa y que no hay modo para la recreación y para los puestos; antes se contaban unas 5 o 10 mil personas que venían y dejaban derrama económica para unas 475 familias”.
Marines González mencionó que además de la parte turística, existe preocupación por el desvase de la presa, toda vez que sus captaciones servían para mantener el nivel de los mantos acuíferos de la zona.