Zamora, Michoacán.- Ante la evidente realidad que se presenta en la Presa de Urepetiro, cuyas aguas se han agotado y han dejado al descubierto casi la totalidad del fondo del vaso acuífero, se torna urgente que se lleven a cabo trabajos de desazolve y limpieza para recuperar la capacidad de almacenamiento, el cual se ha reducido en más de un 50 por ciento, dijo Nahúm Armas Morales.

En entrevista, el experimentado hombre que por décadas trabajara para el Distrito de Riego de Zamora en la segunda mitad del siglo pasado, dijo que desde 1961, en que fuera construida dicha presa en las inmediaciones de los municipios de Tlazazalca y Tangancícuaro, nunca se le ha realizado un desazolve, lo que deja en claro que ya no almacena los catorce millones de metros cúbicos que almacenaba inicialmente.

La presa citada se hizo precisamente para controlar las avenidas del río Tlazazalca y sus afluentes, a fin de evitar inundaciones y fuertes corrientes hacia el Valle de Zamora.

Los trabajos que se hicieron entonces permitieron controlar las corrientes en la parte del municipio de Tlazazalca y almacenar a la vez catorce millones de metros cúbicos de agua, cantidad suficiente para garantizar el riego de las tierras agrícolas en el Valle de Zamora.

Sin embargo, dijo, con el paso del tiempo, el azolve ha ido llenando el vaso de la presa y, hoy en día, del total de la capacidad de la misma, al menos la mitad está ocupada por azolve, por lo que ahora la cantidad de agua que almacena es menor, y en un año como este, es normal que ya no le quede agua.

Esta situación, aunada al programa de maquinaria agrícola implementado por el gobierno del estado, debería ser aprovechada por las autoridades del distrito de riego para que se impulsen acciones de limpia en el vaso de la presa, a fin de retirar las miles de toneladas de azolve que ocupan el vaso, con el objetivo de que llegada la temporada de lluvias, se pueda almacenar más agua.

Armas Morales consideró que de hacerse la limpieza, el extracto deberá ser transportado lejos de la presa, porque luego ocurre lo que ha pasado en otros lugres, que se hace la limpieza y el azolve es colocado a las orillas de donde nuevamente, cuando llueve, es arrastrado hacia el fondo de la presa y queda igual como si no se hubiera limpiado.

Finalmente, hizo un llamado a la sociedad entera para que seamos más cuidadosos con el medio ambiente y particularmente con el agua, porque sin duda alguna el cambio climático, que ya nos alcanzó, seguirá afectado la existencia del vital líquido y cada vez será más complicado obtenerlo.