El Gobierno federal propuso, por primera vez, cobrar una tarifa adicional a las personas y empresas que aprovechan aguas trasvasadas, es decir, que son “importadas” de otras regiones del país con las que no existe conexión natural, a fin de mitigar el impacto ecológico y social que genera esta práctica.

Además, plantea diferenciar el cobro de derechos por aguas superficiales y aguas subterráneas, con una tarifa superior, debido a la sobreexplotación de los mantos, amén que en adelante será la Comisión Nacional del Agua la que determinará, con base en la abundancia real del recurso, las llamadas “zonas de disponibilidad”, factor crucial para fijar el monto de las tarifas a pagar.

“El trasvase es el uso, aprovechamiento o explotación de aguas nacionales trasladadas de una cuenca, por mecanismos artificiales, a una distinta con la cual no tiene conexión natural”, explicó la Secretaría de Hacienda en la iniciativa de reforma a la Ley Federal de Derechos (LFD).

“Dicha situación genera afectaciones ambientales, costos de oportunidad social, así como una disminución en la disponibilidad del agua en la cuenca exportadora, mientras que el efecto en la cuenca de destino es precisamente el aumento de disponibilidad”, agregó la dependencia.

El nuevo derecho sería un pago adicional que realizarían las mismas personas físicas y morales que actualmente ya le pagan al Gobierno por aprovechar aguas nacionales, al amparo de concesiones, asignaciones, autorizaciones o permisos.

Para ello, se adicionaría el artículo 223 Bis a la LFD, estableciendo una tabla con las cuotas a pagar, que varían de acuerdo al uso que se tenga el líquido.

Por ejemplo, un órgano operador de agua potable del Valle de México que actualmente paga 406.20 pesos por cada mil metros cúbicos, pagaría con la reforma 410.62 por cada mil metros, si el agua proviene de fuentes superficiales, y agregarían 74.52 pesos por cada mil metros en caso de recibir aguas trasvasadas, mientras que por aguas subterráneas erogaría 428 pesos.

Un concesionario ordinario del centro del país que este año paga 20.50 pesos por metro cúbico, en 2014 pagaría 13.81 por aguas superficiales, pero tendría que sumar 2.50 pesos por metro cúbico trasvasado. Por aguas subterráneas, la cuota sería de 18.61 pesos.

El contribuyente podrá optar entre aplicar estas cuotas, o calcular por su cuenta el pago extra, con base en una fórmula matemática prevista en la ley, que toma en cuenta factores de degradación ambiental y costos para la región exportadora del líquido.

El artículo 222 de la LFD indica que están obligadas al pago del derecho sobre agua las personas físicas y las morales que usen, exploten o aprovechen aguas nacionales, bien sea de hecho o al amparo de títulos de asignación, concesión, autorización o permiso, otorgados por el Gobierno federal, de acuerdo con la zona de disponibilidad de agua en que se efectúe su extracción de conformidad a la división territorial contenida en el artículo 231 de esta ley.

Analizan disponibilidad

Según el proyecto para reformar la Ley Federal de Derechos en materia de agua, el uso, explotación o aprovechamiento atenderá la disponibilidad real que cada acuífero y cuenca tiene, y no se determinará con base en la extensión territorial del municipio.

Será la Conagua la que determinará las zonas de disponibilidad, que actualmente son nueve. Con la reforma, ahora serán cuatro zonas divididas en dos categorías: aguas superficiales y acuíferos.

Para ello, la autoridad tendrá que usar una fórmula que toma en cuenta factores como volumen anual de importaciones, exportaciones, almacenamiento y evaporación en los embalses de las presas, recarga media anual y descarga comprometida de acuíferos.

La diferencia entre zonas es sustancial. Un metro cúbico de aguas superficiales en la zona uno costará 13.81 pesos, mientras en la zona cuatro sólo 1.50.