Kuala Lumpur, A menos que caigan providenciales lluvias, Malasia puede verse empujado a un estricto racionamiento del consumo de agua de la población, según advierte hoy el ministro de energía, tecnología verde e hidraúlica, Mahdzir Khalid.
La represa que se nutre del río Selangor, principal fuente abastecedora del territorio peninsular del país se encuentra actualmente a un 57 por ciento de su capacidad de embalse, mientras otra instalación similar, la Klang Gates marca un 58 por ciento, las más bajas en los recientes 10 años.
Mahdzir apuntó que sin la pronta llegada de precipitaciones en un volumen sustancial esas represas se quedarán en 16 días en un 45 por ciento, lo que se podría considerar eventualmente casi una catástrofe.
De hecho se han reportado interrupciones de abastecimiento en 29 áreas de Kuala Lumpur, en parte porque de los 170 millones de litros de agua diarios que se sirven normalmente ahora se limitan a 113 millones, en circunstancias en que arrecia el calor y aumenta la demanda de líquido.
El presidente de la Asociación Acuífera, Adnan Alhabshi, informó que las flotas de depósitos para cubrir necesidades en casos de escasez tienen limitaciones para satisfacerlas y recomendó a los malasios conservar el agua, acortar los baños, abstenerse de lavar vehículos y regar menos a los jardines.
Solicitó al gobierno que también debe considerar la siembra de nubes para garantizar que aumenten los niveles de embalses y el suficiente suministro de agua, ante la perspectiva de un crítico período de sequía.