Si el Gobierno no resuelve el que los mexicanos tengan acceso a agua para beber fracasarán la Cruzada Nacional contra el Hambre y la Estrategia Nacional para la Prevención y el Control del Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes, alertó Alejandro Calvillo, director de El Poder del Consumidor. 

"El acceso a agua para beber de calidad es un derecho que tendríamos que tener toda la población mexicana. En la Ciudad de México pagamos servicios de agua potable, sin embargo, no tenemos ninguna garantía de que el agua que llega a nuestras casas es agua con calidad para beber", indicó Calvillo.

Señaló que esta situación ha ocasionado que el País sea el mayor consumidor de agua embotellada, 234 litros por persona, lo que tiene un impacto económico en las familias, principalmente en las de escasos recursos.

Xaviera Cabada, coordinadora del área de salud alimentaria de El Poder del Consumidor, indicó que han realizado trabajos en comunidades de Guerrero y en éstas predomina la falta de acceso al agua y la alta disponibilidad de refresco.

Cabada aseguró que esto ha ocasionado problemas no sólo de obesidad y diabetes, sino también de desnutrición.

"El alto consumo de refresco también está ligado a la desnutrición ... porque no proporciona ningún nutrimento. En los municipios donde se está trabajando la Cruzada Nacional contra el Hambre... el agua debería ser prioridad", mencionó.

Por otra parte, Brenda Rodríguez, integrante de la Coalición de Organizaciones Mexicanas por el Derecho Humano al Agua, aseguró que más de 9 millones de mexicanos, tanto de zonas urbanas como rurales, no tienen servicios de agua entubada.