México, DF. Chinamperos de los barrios de Xochimilico dedicados a la crianza de ajolotes, especie endémica de la región, aseguran que no ha desaparecido.
“Si bien el número de individuos ha disminuido, el también llamado perro de agua, sigue existiendo en la zona lacustre de la delegación Xochimilco, su hábitat natural” informó Manuel Rodríguez Rojas, quien desde hace 6 años, encabeza el grupo de chinamperos y pescadores que participan en un proyecto para preservarlo.
Entre los pescadores se encuentra Antonieta Zárate, quien junto con 80 personas más se encargan de buscar los huevecillos de ajolote para ponerlos a salvo de especies como la carpa y tilapia, sus principales depredadores, y de este modo iniciar el proceso de reproducción en cautiverio que hasta la fecha ha dado resultados positivos.
Actualmente, el criadero ubicado en Canal de Cuemanco cuenta con más de 300 ajolotes, algunos de ellos, hembras en estado gestante, que diariamente son alimentados, limpiados y medidos como parte de las etapas preparatorias para ser liberados en los canales.
Son 2 años y medio para que los ajolotes alcancen una talla de 25 centímetros y la madurez para sobrevivir en su hábitat. Un mes antes de ser libreados son puestos a pruebas para asegurar su vida fuera de las peceras donde son criados.
Cada año en el mes de marzo, este grupo de chinamperos, sin fines de lucro, sueltan ajolotes para ayudar a su reproducción en condiciones normales y afirman que la población es mayor a la que se ha mencionado en los últimos días.
“Nosotros como pescadores y chinamperos sabemos que existen más ejemplares; pero también estamos conscientes de que es una especie que debe cuidarse sobre todo de los depredadores entre los que también se encuentra el hombre que busca venderlo en el mercado negro a un costo de 2 mil a 2 mil 500 pesos”.