Cancún, Qroo. La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) preparaba la negativa a los permisos ambientales que solicitaban para desarrollar dos grandes proyectos turísticos: La Ensenada y Cabo Dorado, en Quintana Roo y Baja California, respectivamente.

En ambos casos los promoventes desistieron de continuar con el trámite, antes de que la dependencia les negara los permisos de manera oficial.

CABO DORADO

En el caso de este proyecto, que pretendía construirse contiguo al santuario natural de Cabo Pulmo, la Semarnat incluso ya emitió el resolutivo respecto del análisis de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) en el que niega los permisos ambientales por una serie de inconsistencias en el documento sometido a evaluación, apenas hace dos meses.

Entre las inconsistencias más importantes se menciona que la firma La Rivera Desarrollos BCS no identificó las especies vegetales existentes en el predio donde se desarrollaría el proyecto y que están protegidas por la NOM-059 tanto a nivel terrestre como marino; hicieron una estimación errónea de la cantidad de agua que demandará el proyecto durante toda su vida últil, lo cual suponía el riesgo de propiciar una presión sobre los recursos hídricos de la zona, ante la insuficiencia de los volúmenes concesionados para satisfacer las necesidades de este proyecto de más de 3,770 hectáreas donde pretendían construir dos campos de golf, nueve hoteles, zona residencial y centros comerciales.

En el resolutivo, la Semarnat expone que estas obras tendrían una afectación en el Parque Nacional Cabo Pulmo, en especial en el arrecife de coral, por contaminantes químicos y de materia orgánica por el arrastre o lixiviación de fertilizantes y plaguicidas aplicados a los campos de golf y áreas verdes del complejo en general, además de que la superficie de deforestación de la zona alcanzaría las 1,219 hectáreas.

El resolutivo concluye que, por todo ello, la Semarnat le niega la autorización solicitada en materia de impacto ambiental, “por no ajustarse a los dispuesto en el Artículo 30 de la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente (LGEEPA)”.

LA ENSENADA

El otro caso que se canceló es el de La Ensenada, en Holbox. Al igual que el anterior, el promovente, la firma Peninsula Maya Developments, retiró la MIA del proyecto, que ingresó a evaluación desde septiembre del 2012.

Raúl Omar González, delegado de Semarnat en Quintana, anticipó en su momento que el proyecto sería desechado, debido a que los promoventes tenían muy poco tiempo para presentar información adicional que les había solicitado la dependencia respecto de los ciclos migratorios de las especies que habitan la isla grande de Holbox.

“Lo más fuerte de la información que se les solicitó era un estudio que se lleva más de un año realizar, pues comprende los ciclos migratorios de aves y otras especies durante las cuatro estaciones del año.

“Ellos se amparan contra la solicitud de esa información adicional y detienen el reloj; los tiempos oficiales que marca la ley para emitir el resolutivo, que son 60 días hábiles después de haber ingresado la MIA a Semarnat”, explicó.

Aseguró que una vez que se había reiniciado el proceso de evaluación, el pasado 29 de mayo, restaban entre 15 y 20 días de plazo para que la delegación de la Semarnat emitiera el resolutivo correspondiente, advirtiendo que en caso de que no cumplieran con los estudios adicionales solicitados procederían con la cancelación del trámite y, por tanto, la negativa a los permisos ambientales. Apenas seis días después de estas declaraciones, los promoventes del proyecto se desistieron de continuar con el trámite.