El agua para riego agrícola procedente de Nuevo México, de las presas El Elefante y El Caballo, llegó ayer a esta frontera rumbo al Valle de Juárez a través de la Acequia Madre, pero no alcanzará para todos.

El volumen inicial de agua rodada fue de 3 metros cúbicos por segundo, según informó Jesús Luévano Grano, secretario de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) Sección México.

El funcionario indicó que de acuerdo al convenio de este año con autoridades de Estados Unidos, la dotación definitiva para México será de 19 millones de metros cúbicos, poco más de la cuarta parte del total comprometido en el convenio binacional de 1906, que es de 74 millones de metros cúbicos anuales.

Estos 19 millones de metros cúbicos equivalen a 110 años de extracción de agua de pozos para consumo humano en una ciudad como Juárez.

Cada año, la Junta Municipal de Agua y Saneamiento extrae en promedio 171 mil metros cúbicos de agua del subsuelo para inyectarla a la red de suministro.

Luévano Grano aclaró que este flujo dejará de circular hacia la Acequia Madre y los campos de siembra del Valle de Juárez entre la primera y la segunda semanas de agosto, cuando se haya completado la dotación.

Aclaró que el flujo se reducirá hoy martes a 2 metros cúbicos por segundo, por instrucciones de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para verificar el funcionamiento de la red de canales, pero se incrementará a 5 metros cúbicos por segundo a partir del 26 de junio, cuando aumente la demanda de agua de riego en las zonas agrícolas con el inicio del ciclo de siembras de verano.

Explicó que se enviarán a México 19 millones y no 74 millones de metros cúbicos de agua, el 25 por ciento, porque las presas El Elefante y El Caballo se encuentran por debajo del 20 por ciento de su capacidad, lo que ha provocado que en Texas y en zonas cercanas a las presas se haya restringido el reparto de agua en esa misma proporción.

“En esas zonas de Estados Unidos está restringido el 75 por ciento del suministro de agua rodada, y en esa misma proporción llegará a México. El resto de las necesidades de agua, aquí y allá, se está completando con agua de pozos, con extracciones del subsuelo”, detalló.

El funcionario explicó que el agua de las presas dependen del deshielo en la cuenca del río Grande, de las montañas de Colorado y del norte de Nuevo México, “pero este año hubo demasiado viento y evaporación, lo que impidió que en menor medida el hielo se descongelara y filtrara hacia los cauces del río”.

Por esta razón, advirtió, el agua no alcanzará para todos los productores agrícolas del Valle de Juárez.

Con la entrega de los 19 millones de metros cúbicos, la de este año será la segunda entrega de agua más baja de los últimos siete años, considerando que en el 2013 el suministro fue de 4.5 millones de metros cúbicos; en 2012, de 28.6 millones; en 2011 fue de 31.7; en 2010, 69.5; en el año 2009, 71.2; y en el 2008 se entregaron 66.2 millones de metros cúbicos.