Hermosillo, Son. Unos 200 habitantes de los pueblos cercanos al río Sonora, principalmente de la comunidad de San Pedro, en Ures, bloquearon la carretera Ures-Baviácora, en protesta por la lenta respuesta de autoridades y Grupo México, ante la emergencia generada por el derrame de tóxicos en los ríos Bacanuchi y Sonora.

Los manifestantes bloquearon el paso de vehículos en el kilómetro 14 de la citada vía, en donde denunciaron que el Fideicomiso creado por Grupo México y operado por el gobierno federal, no reparte los recursos de forma eficiente entre todos los afectados por la contaminación que mantiene detenidas las actividades productivas en la región.

Señalaron que luego de que el pasado 6 de agosto la minera Buenavista del Cobre tuvo fallas en el sistema de represos en donde se contenían los lixiviados de cobre acidulado, y que los tóxicos fueron a dar a los ríos Bacanuchi y Sonora, se detuvo la extracción de agua de más de 300 pozos que abastecían a las comunidades de 7 municipios.

Al aplicarse las medidas de prevención que evitan que la población consuma o tenga contacto con el agua del río y de los pozos aledaños al afluente, se detuvo casi toda actividad agrícola, ganadera, así como comercial, por lo que más de 23 mil personas enfrentan hoy en día carencia de agua y alimentos, mayores niveles de pobreza y riesgos sanitarios.

Por otra parte, este martes diarios locales en Hermosillo confirmaron la información que La Jornada había hecho pública el pasado 7 de septiembre, en el sentido de que algunos pozos de donde se extrae agua para abastecer a los habitantes de este municipio, están ya contaminados por los tóxicos que fluyeron desde la mina Buenavista del Cobre, en Cananea.

De acuerdo a lo publicado en el periódico Expreso este martes, en dos pozos aledaños a la presa El Molinito, en el municipio de Hermosillo, se detectó arsénico en concentraciones 11 veces arriba de la norma permitida.

También se detectó la presencia de fierro, 4.3 veces arriba de la norma.

Esos muestreos realizados por la Comisión Nacional del Agua confirman los señalamientos hechos por el presidente municipal de Hermosillo, Alejandro López Caballero, quien señaló que se había dejado de operar algunos pozos que abastecían al oriente de la capital sonorense, debido a que se tenían noticias de que la contaminación que estaba contenida en la presa El Molinito, se iba a filtrar al subsuelo y a los mantos freáticos.