Sin agua potable, incomunicados, caminos cortados, sin teléfonos celulares, sin Internet, sin combustible… Miles de chilenos en el norte del país claman la ayuda del gobierno y de la comunidad internacional para recuperar sus vidas cuatro días después de un histórico temporal que arrasó con pueblos y ciudades.
La noche del sábado, la cifra de muertos que se matenía en 10, se elevó a 12, mientras que alrededor de 20 personas se encuentran desaparecidas.
El nuevo balance de víctimas, entregado por el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, incluye dos nuevas víctimas mortales y un incremento en el número de desaparecidos por la catástrofe que afecta las regiones de Coquimbo, Atacama y Antofagasta.
Peñailillo señaló que hay un total de 4,634 damnificados y 5.584 personas se encuentran en los albergues facilitados por las autoridades.
"Quisiera hacer un llamado a la solidaridad de mis compatriotas chilenos", dijo Maglio Cicardino, alcalde de Copiapó, una de las ciudades más golpeadas por la tragedia.En vez de nieve, como es habitual en esta época del año, en la Cordillera de los Andes cayeron más de 30 milímetros de lluvias en menos de 24 horas. Los daños son cuantiosos.
"Los copiapinos siempre nos hemos puesto en las situaciones difíciles con todos los otros puntos del país cuando ha sucedido tragedias, hoy día Copiapó necesita ayuda", dijo Ciocardino a radio Cooperativa.