El cambio climático no solo está causando océanos más cálidos y un clima errático. Según los científicos, también tiene la capacidad de alterar la forma de la planeta.

En un estudio de cinco años publicado en la revista Nature, el autor principal Michele Koppes, profesor asistente en el Departamento de Geografía de la Universidad de British Columbia, comparó la evolución de glaciares en la Patagonia y en la Península Antártica.

Ella y su equipo encontraron que los glaciares de la Patagonia más cálida se movían más rápido y causaban más erosión que los de la Antártida, ya que las temperaturas más cálidas y el derretimiento del hielo ayudaron a lubricar el lecho de los glaciares.

"Encontramos que los glaciares erosionan de 100 a 1.000 veces más rápido en la Patagonia que en la Antártida", dijo Koppes. "La Antártida se está calentando, y mientras se mueve a temperaturas superiores a 0 grados centígrados, los glaciares van a empezar a moverse más rápido. Ya estamos viendo que las capas de hielo están empezando a moverse más rápido y deben ser más erosiva, cavando valles profundos y derramando más sedimentos en los océanos ".

Las repercusiones de esta erosión se suman a los ya complejos efectos del cambio climático en las regiones polares. Glaciares en movimiento más rápido depositan más sedimento en cuencas aguas abajo y en las plataformas continentales, lo que podría afectar a la pesca, las presas y el acceso al agua dulce en las comunidades de montaña. "Los márgenes continentales polares en particular, son puntos calientes de biodiversidad", señala Koppes. "Si se está bombeando mucho más sedimento en el agua, está cambiando el hábitat acuático."

El Ártico canadiense, una de las regiones que se calientan más rápido del mundo, sentirá estos efectos de forma aguda. Con más de cuatro grados centígrados de calentamiento en los últimos 50 años, los glaciares están al borde de un cambio importante ya que fluirán hasta 100 veces más rápido si se producen cambios climáticos por encima de cero grados centígrados.