Campesinos de Morelos se oponen al Plan Integral de su Estado, debido a la construcción de gasoductos y termoeléctricas que comprometen más de 10.500 hectáreas de riego.
De acuerdo a una denuncia de la senadora Iris Vianey Mendoza, la edificación de dos termoeléctricas en Huexca, municipio de Yecapixtla, Morelos, afectará a más de 6.200 ejidatarios, dado que en las obras se empleará agua del río Cuautla; esto reducirá la disponibilidad para riego y consumo humano, informó el grupo parlamentario del PRD del Senado el 1 de enero.
La legisladora advirtió que a raíz del Plan Integral Estatal, el gobierno de Morelos, actuó por encima del interés de los ejidatarios y apoyó los intereses de las empresas españolas Avengo y Elecnor, concesionarios para la construcción de las termoeléctricas.
La construcción de las termoeléctricas afectará además a más de 10.500 hectáreas de la región oriente de Morelos, dado que la Comisión Federal de Electricidad pretende llevarse 50 millones de litros de agua por segundo, desde el cauce del río Cuautla.
La región se vería doblemente afectada por la construcción de un gasoducto que alimentará a las plantas termoeléctricas desde el Petróleo Mexicanos (PEMEX).
“Se construirá ese gasoducto de 150 kilómetros y 30 pulgadas de diámetro que irá desde los ductos de PEMEX en Tlaxcala hasta el lugar de las centrales de generación eléctrica, así como una línea eléctrica de 20 kilómetros a la subestación de Yautepec y, finalmente, un acueducto de 10 kilómetros de longitud desde Cuautla”, detalló.
Según la Agencia Autónoma de Comunicación Subversiones, el gasoducto pasaría por las faldas del volcán Popocatépetl y a través de más de 60 comunidades campesinas de los estados de Tlaxcala, Puebla y Morelos, para transportar diariamente 9 mil millones de litros de gas natural y abastecer a las termoeléctricas, informó el 31 de mayo del 2014.
El Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua de las regiones afectadas explicaron que se construirá además una línea eléctrica de 20 kilómetros de longitud a la subestación Yautepec, Morelos, un acueducto que pretende trasladar 50 millones de litros de agua diaria a las termoeléctricas, y que su trazo va del municipio de Ayala a Huexca, en Morelos, con una longitud de 12 kilómetros.
El año pasado unos 60 pueblos a las faldas del volcán Popocatépetl, lograron la cancelación temporal de la construcción del gasoducto, valiéndose de machetes, piedras y estacas, con lo que arrancaron la traza del gasoducto, según el medio La Jornada, el 24 de octubre.
El medio E-Consulta destacó que "el pasado 2 de diciembre, 12 comunidades de Atlixco y Nealtican interpusieron tres amparos colectivos contra la construcción de la obra, debido a los peligros que representa en caso de una erupción", del activo volcán Popocatepetl.
El amparo fue "también por las técnicas de represión que han utilizado las empresas y dependencias involucradas, que han llevado al encarcelamiento de opositores", en su reporte del 30 de diciembre.
El medio mexicano señaló que "el conflicto por el gasoducto Morelos tomó un tinte político con la detención de dos opositores al proyecto en abril de 2014. Enedina Rosas Vélez, de San Felipe Xonacayucan".
La representante legal de los pueblos, Patricia Montaño Flores, afirmó que más de 180 personas firmaron los recursos porque se ven afectadas de manera directa en sus propiedades o porque el trazo perjudica las rutas de evacuación, según E-Consulta.
Por el contrario, el delegado en Puebla del Registro Agrario Nacional (RAN), René Lechuga Fosado, explicó que los campesinos que se oponen al gasoducto Morelos "están mal informados" y por ello no aceptan el proyecto, añadió el medio mexicano.
Al respecto la Procuraduría Agraria, a cargo de Isabel Merlo Talavera indicó que algunos campesinos acordaron que la empresa constructora italiana Bonatti, "brindará contraprestaciones a favor de los ejidos".
