Mazatlán, Sinaloa.- Un estudio de la Universidad de Harvard alertó a Sinaloa sobre el grave impacto que podría tener la sequía en el futuro y cómo urge la política pública y las obras de infraestructura para mitigarla.

El senador Aarón Irízar estuvo el fin de semana en Mazatlán donde habló del estudio preliminar del México dividido en dos. 

“Ellos predeterminaron a dos Méxicos divididos: uno entre la abundancia del agua y el otro sumido en  profunda sequía, en donde nuestra entidad está ubicada”.

La vulnerabilidad. Se refirió a la proyección hecha por catedráticos y especialistas en el tema para que de inmediato se hagan las políticas y las obras de infraestructura necesarias en la entidad, así como generar la voluntad ciudadana  en el cuidado del agua.

“Esa es tarea de muchos y es una tarea importante”. México es un país vulnerable a las sequías, porque el 52% del país, está catalogado como árido o semiárido”. 

Es decir, catorce estados del territorio nacional presentan zonas áridas y semiáridas, especificó el legislador del Senado de la República.

El documento pretende ser más que una llamada para alertar, fundamentalmente a estados como Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, Durango, Zacatecas y Sinaloa, de que el fenómeno viene y es bastante serio.

“Es un asunto del gobierno, pero también de la sociedad, que debe tomarse en serio y prevenir el impacto”.

Futuro trágico. El documento elaborado en la Universidad, pretende evidenciar que efectos agravados de las sequías y la escasez de agua no sólo son por causas naturales, sino por factores sociales, donde las malas políticas de administración y uso de las reservas de agua y la falsa idea de la abundancia de agua, prevalecen.

Además de advertir que la sequía es uno de los problemas que más daños está provocando en la sociedad mexicana, principalmente en el norte del país, donde históricamente se presenta el fenómeno, y donde Sinaloa se ubica.

La sequía es un fenómeno natural que provoca conflictos y desastres sociales.

Si ahora el problema de la sequía se observa trágico, para el futuro, las cosas se vislumbran todavía peor.

La proyección para los últimos 30 años, citan que la disponibilidad de agua per cápita ha ido disminuyendo y de mantenerse esa tendencia, en el año 2025, algunas regiones alcanzarán niveles cercanos e incluso inferiores a mil metros cúbicos, por habitante y por año.

Lo que es considerado dentro de la escala de clasificación como una disponibilidad“muy baja” o “extremadamente baja”, respectivamente.