José Guadalupe Rivera Ocampo fue retenido este lunes a cambio de que se negocio un acuerdo para lograr abastecimiento de agua en la localidad.

México.- Habitantes del poblado de Apango ubicado en el municipio de Mártir de Cuilapan, Guerrero, bloquearon los cuatro accesos y retuvieron al alcalde José Guadalupe Rivera Ocampo, así como a tres funcionarios municipales.

Cerca de 400 pobladores demandan a las autoridades de los tres niveles resolver el problema de desabasto de agua en la localidad, que fue donde arrancó la Cruzada Nacional contra el Hambre.

La localidad padece de manera constante desabasto de agua debido a que los pobladores de la comunidad de Zotoltitlán, donde se suministra el líquido, suspenden el servicio.

El grupo de inconforme señala que dos semanas atrás hizo entrega de un pliego petitorio al alcalde, para que se liberaran 100 mil pesos con el objetivo de explorar alternativas de abastecimiento, sin embargo, el edil firmó con Zotoltitlán el acuerdo para cederles el registro del agua, pese a que la Comisión Nacional del Agua otorgó un permiso donde se plantea la extracción del líquido para la comunidad de Apango durante un periodo de 30 años a partir de 2012.

El hecho indignó a los habitantes de la cabecera, quienes optaron por presionar de maneras más contundentes a las autoridades, primero mediante la exigencia de una reunión con el edil José Guadalupe Rivera Ocampo y posteriormente con el cierre de los accesos carreteros con las comunidades de Aixcualco, Zotoltitlán y el municipio de Tixtla, impidiendo la salida o entrada de la población.

El presidente que estaba de visita en la Ciudad de México, regresó este lunes alrededor de las 19:30 horas a la cabecera municipal, pero fue retenido en el crucero a Zotoltitlán, junto con el síndico Omar Eric Moctezuma Ocampo y dos regidores, a quienes obligaron a caminar por la calles del poblado, entre gritos e insultos, tras lo cual incendieron una camioneta oficial donde viajaba Rivera Ocampo.

Los funcionarios retenidos fueron trasladados al módulo de la policía municipal que se ubica en la salida hacia el municipio de Tixtla, mientras los inconformes demandan la presencia de las autoridades federales para resolver el conflicto.