Los elefantes marinos han ayudado a demostrar que el agua dulce de las plataformas de hielo antárticas, ralentiza la formación de las corrientes marinas que regulan las temperaturas globales.
El estudio, dirigido por Guy Williams, del Institute of Marine and Antarctic Studies and Antarctic Climate and Ecosystems CRC, se publica en Nature Communications. Rob Harcourt, de la Universidad Mcquaire , participó en la investigación con el sistema de seguimiento y recogida de datos de dispositivos colocaldos en estos animales.
Williams dijo que los hallazgos plantearon cuestiones sobre el potencial de cambio futuro en los patrones de circulación global del océano.
"La Antártida y el Océano Austral son como un corazón latiendo, produciendo corrientes profundas y de gran alcance de agua fría que impulsan la mezcla global de los océanos y regulan la temperatura atmosférica," dice el cientíÖco.
"Estas corrientes comienzan con la intensa formación de hielo marino alrededor del continente antártico en invierno, que crea sumideros de aguas frías, densas y saladas y ×uye lejos del continente en gran volumen".
"Si esta generación de agua del fondo del océano Antártico se debilita, conduce a cambios en los patrones de circulación oceánica global, lo que puede, a su vez, conducir a cambios en el clima global". En 2011, el equipo de investigadores descubrió una cuarta fuente de agua antártica de fondo frente al cabo Darnley en el este de la Antártida.
La nueva investigación, incluyendo dos años adicionales de datos, muestra que la bahía de Prydz hace año contribución secundaria importante a esta cuarta fuente. "Sin embargo, encontramos que la contribución de la bahía de Prydz es menos salada y densa debido a las in×uencias de las plataformas de hielo cercanas", dice el cientifico.
"Podemos imaginar fácilmente que la producción de estas corrientes oceánicas globales se hará más lenta a medida que la tasa de fusión del hielo en toda la Antártida aumente".
Desde 2011, los elefantes marinos en la estación de Davis han sido instrumentados con sensores oceanográÖcos como parte del sistema IMOS (Australia's Integrated Marine Observing System).
Su uso ha permitido obtener estos datos sobre el aumento de agua dulce. Cuando estos animales suben a la superÖcie, sus sensores transmiten información a través de satélite, y los datos se ponen a disposición, casi en tiempo real, del Sistema Mundial de Telecomunicación de la Organización Meteorológica Mundial para su uso inmediato. El archivo de datos oceanográficos recogidos por los elefantes marinos es utilizado además para la investigación ecológica de su comportamiento y ayudar a su conservación