“A nosotros desde mediados de diciembre nos apretaron las llaves del agua, porque para que llegue tenemos que rezarle a todos los santos a ver si baja, porque no hay suficiente presión, ni con bomba ni con chupa cabra. Ya la gente del sector no haya que colocar”, contó de forma jocosa Federico Jiménez, residente del sector 8 de San Jacinto, quien precisó que durante este 2016 solamente ha recibido agua una sola vez.
Igual le pasa a Zonia Rodríguez, en el sector de Los Haticos por arriba, quien recibió agua la semana pasada, luego del Día de Reyes, y no ha vuelto a ver salir el vital líquido de la tubería. “Se agudizó la situación este año, suponemos que por la sequía”, relató contrariada.
El cronograma de suministro de agua potable 36x108 (36 horas de agua por 108 sin el servicio) para los municipios que se surten de Manuelote, Tulé y Tres Ríos, y que se implementó desde septiembre de 2015, no se cumple tal cual. Así lo denuncian constantemente los habitantes de la capital zuliana, quienes aseguran que esperan más de los 4 días reglamentarios para que les llegue el servicio.
La situación sigue crítica para los residentes de Ciudad Lossada, donde desde noviembre pasado el agua llega cada ocho días. “Uno se aguanta los días sin recibir el vital líquido, pero lo peor no es eso, que ya representa un problema, sino que las 36 horas de agua se reducen a solamente ocho o nueve cuando máximo. Si tienes suerte, y te das cuenta a tiempo que tienes agua, colocas la bomba, y en esas pocas horas debes lavar ropa, limpiar aquello que no has podido por la falta del servicio, y guardar agua para los próximos días”, explicó al detalle Ginette Duarte, habitante de la zona.
La fuerza de bombeo de agua ha mermado considerablemente tras la intensa sequía que golpea los embalses zulianos; sin embargo, algunos consejos comunales denuncian mal manejo de las válvulas de paso en ciertas áreas. Jhony Nava, vocero del consejo comunal La Marina, en el sector 2 de San Jacinto asegura que “hay personas que están manipulando esas válvulas que abre Hidrolago, y deja a mucha gente sin agua”. El representante comunal, aseguró que hay casas en veredas que pasan más de 15 días sin agua.
“La gente paga por un botellón 400 bolívares, y por un camión cisterna hasta Bs .4.000, para llenar el tanque de sus casas. Eso es un negocio redondo, que está afectando el bolsillo de los marabinos y al que se le debe meter la lupa con las autoridades”, indicó Nava.
La sequía prolongada desde el 2013, 2014 y 2015 ha hecho mella en la reserva de agua de los embalses zulianos. Entre dos y hasta 11 centímetros diarios descienden las tres reservas situadas al norte del estado. El trasvase con bombas de Manuelote hacia Tulé ha sido otra medida para paliar la situación.
Y vienen días más duros, el pronóstico no es el más alentador, pues según ya el Centro Internacional para la Investigación del Fenómeno de El Niño precisó que este 2016 viene más fuerte, lo que se traduce para todo el norte del país en menos cantidad de precipitaciones.
El presidente de la Hidrológica del Lago (Hidrolago), Freddy Rodríguez, venía anunciando a principios de año medidas más drásticas para los dos millones y medio de habitantes que se surten de estos embalses. Sin embargo, el gobernador, Francisco Arias Cárdenas, precisó que aún no apretarán el 36x108, esperando que lleguen las lluvias de mayo, mes que tiene estimado el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inameh) que comience a debilitarse fenómeno El Niño.