Decididos a impedir la construcción de una empresa hidroeléctrica en su territorio, pobladores de Coyolapa, comunidad perteneciente a Zoquitlán, junto con organizaciones sociales, anunciaron la realización del Encuentro de las Resistencias Contra los Megaproyectos para el 28 de este mes en la cabecera de ese municipio.

Desde hace varios meses la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) liberó el permiso para la empresa Ferrominero México, para la construcción de una hidroeléctrica, en la comunidad de Coyolapa, ubicada entre los límites de Zoquitlán y Tlacotepec de Porfirio Díaz, lo cual provocó la molestia de los pobladores debido a que no se aplicaron los convenios internacionales para esos proyectos.

Dichos convenios especifican que antes de dar la autorización es deber del gobierno llevar a cabo una consulta a los pueblos que podrían ser afectados, pero las autoridades violan esos acuerdos y liberan los permisos de forma indiscriminada, indicaron los inconfromes.

Omar Esparza, líder del Movimiento Agrario Indígena Zapatista (Maiz), resaltó que el proyecto va a causar el desplazamiento de pobladores de esa región, afectará el medio ambiente al utilizar de forma indiscriminada el agua de los ríos Coyolapa y Asalam, que forman el río Tonto.

Además, hay el riesgo de despojo de tierras contra los campesinos de esa región y de sus horas de agua en el caso de los que logren mantener sus propiedades, de modo que pueden desaparecer comunidades enteras en la Sierra Negra.

Puebla, dijo, es uno de los estados en los que el gobierno impone a los pueblos indígenas proyectos de muerte para beneficiar a grandes consorcios que solo llegan a saquear los recursos naturales.

Sin embargo, destacó que ya las comunidades nahuas de la Sierra Negra se organizan para impedir que en esa región se construya la hidroeléctrica, porque saben perfectamente que no recibirán ningún beneficio con esa obra.

En Tepexilotla, los pobladores dieron a conocer que no van a permitir el acceso del personal que la empresa lleve para la obra, para lo cual contarán con el apoyo de otras comunidades vecinas.

En el encuentro del próximo 28 de este mes los participantes decidirán las acciones a seguir, con el fin de parar el proyecto en Coyolapa, así como obligar al gobierno a desistir del permiso para la empresa.