Entre un 25 y 30 por ciento del agua potable que reciben los municipios mexiquenses, se pierde por el deterioro y el grado de oxidación que presentan las tuberías del Estado de México, pues, en algunas regiones como Tlalnepantla o Naucalpan, la red no ha sido sustituida desde hace más de 20 años. Raymundo Garza Vilchis, integrante de la Comisión de Recursos Hidráulicos de la 59 Legislatura local, señaló que el sistema de agua del Estado de México se encuentra en crisis, pues el sistema de tuberías está caduco y para rehabilitarlo se requiere de una inversión millonaria que difícilmente la CAEM y los organismos de agua municipales podrán cubrir. Indicó que los organismos públicos descentralizados de agua de los municipios mexiquenses son ineficientes, derivado de las deudas históricas que arrastran y de la mala dirección por parte de quienes los encabezan.
Agregó que los organismos de agua están en quiebra, por lo que deben ser soportados financieramente por los ayuntamientos, pues no han sido capaces de recaudar lo suficiente para pagar sus propios insumos y, al mismo tiempo, ejecutar obra hidráulica. Por otro lado, el legislador aseveró que más de la mitad de los funcionarios que los dirigen no tienen la capacidad adecuada, pues son colocados por los alcaldes aún sin tener experiencia técnica y en administración de recursos, por lo que, desde el Congreso local, se busca actualizar la ley para que quienes ocupan estos cargos tengan al menos seis años en el manejo de los recursos hídricos. |