Pachuca. El Congreso de la Unión exhortó al gobierno de Hidalgo y a entidades federales verificar el riesgo sanitario en un arroyo de la localidad El Mezquite I, por una posible contaminación derivada de la actividad minera de Carrizal Mining.

La Jornada publicó el 23 de abril las advertencias de los vecinos del arroyo de la barranca de San Francisco, que denunciaron que un alto mando de la empresa trató de hacerlos firmar un documento en que rechazaban haber dado declaraciones a este diario, a lo cual se negaron.

Mientras, representantes de la minera dicen tener un certificado de industria limpia emitido por la Profepa, que aún no ha informado los criterios con que lo otorgó.

Por mayoría de votos, la Comisión Permanente del Congreso de la Unión aprobó un punto de acuerdo del grupo parlamentario de Morena en el cual se hace un exhorto al gobierno de Hidalgo, encabezado por Omar Fayad Meneses, a la Comisión Nacional del Agua (Conagua), a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y al ayuntamiento del municipio de Zimapán, "para que en el marco de sus respectivas atribuciones, verifiquen el riesgo sanitario del arroyo de la Barranca de San Francisco, para que de ser el caso, tome las medidas necesarias que garanticen la salud plena de los habitantes de la zona."

Tal como lo publicó La Jornada el pasado 23 de abril, vecinos y autoridades de la localidad de El Mezquite I del municipio de Zimapán, denunciaron que la minera Carrizal Mining S. A. de C. V. vierte jales o desechos en el arroyo del fondo de la barranca de San Francisco, que surte de agua a localidades indígenas otomíes de la sierra Gorda hidalguense.

Carrizal Mining arrenda las minas que explota a la empresa Peñoles desde hace 10 años.

La propuesta del punto de acuerdo en el que se pide se haga una exhaustiva investigación sobre el caso y se lleven al cabo las medidas correspondientes para combatir el posible daño ecológico fue elaborada por los diputados Araceli Damián y Jesús Serrano Lora, ambos de Morena, quienes lo presentaron ante la Comisión Permanente el pasado 30 de mayo.

La proposición fue aprobada por mayoría de los integrantes de la Tercera Comisión de Hacienda y Crédito Público, Agricultura y Fomento; Comunicaciones y Obras Públicas el pasado 14 de junio, con 11 votos a favor, de los cuales seis fueron del PRI, dos del PAN, uno del PRD, uno del Verde Ecologista y uno de Morena; hubo cero votos en contra, cero abstenciones y seis diputados ausentes.

Retoman información de La Jornada

En la ficha técnica de dictamen se retomó lo publicado por La Jornada el pasado 23 de abril en torno a que según las autoridades de El Mezquite I han aparecido animales muertos por la presunta contaminación por desechos provenientes de una presa de jales de la mina Carrizal Mining SA de CV.

Dicha acusación ha sido rechazada por Carlos Alberto Silva Ramos y Sergio Durán, director general y gerente, respectivamente, de la empresa mexicana Carrizal Mining, quienes aseguraron que la presa de jales no tiene daños en su estructura, por lo que era imposible que se vertieran los desechos en el arroyo.

En cuanto al tono rojizo que se observa en las orillas del arroyo como resultado de jales mineros en el agua, los directivos de la empresa aseguraron que si bien podría tratarse de óxido, no proviene de la minera, sino que es de origen natural.

Silva Ramos destacó que Carrizal Mining tiene un certificado de industria limpia emitido por la Profepa, el cual es muestra de que la empresa cumple con la norma que estipula tanto esa dependencia como la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

En la ficha técnica del punto de acuerdo que se puede consultar en la liga de la Gaceta Parlamentaria se cita lo que declararon los representantes de la empresa.

"Que para las actividades de extracción se emplean pequeñas cantidades de cianuro, el cual es “destruido” [en parte] por medio de luz y oxígeno inyectado mediante una bomba de aire”, mientras que la otra restante “se evapora”. En cuanto al tono rojizo de las orillas del arroyo, asegura que “si bien podría tratarse de óxido, no proviene de la minera, sino que es de origen natural".

No obstante, los diputados Araceli Damián y Jesús Serrano Lora pusieron en duda este argumento al señalar que: "la minería moderna utiliza el cianuro de sodio para la separación de metales, puesto que es un compuesto químico muy eficiente, relativamente económico, pero al mismo tiempo, extremadamente tóxico".

"La industria defiende el uso de este veneno aduciendo que una vez desechado se degrada rápidamente por acción de la luz solar, pero esto constituye una falacia, pues omite decir que el mismo atributo por el que es utilizado en la minería, su capacidad de atracción, lo combina con cientos de sustancias y minerales generando muchos compuestos también tóxicos que permanecen en el ambiente, y que habitualmente no son considerados en los controles y monitoreos de las autoridades".

"Por su parte, el arsénico está clasificado dentro del Grupo 1 de la Lista de Sustancias de Interés Prioritario que publica el Ministerio de Salud de Canadá debido a su carácter venenoso y porque es una causa del desarrollo de cáncer en los humanos. El consumo de ciertas cantidades de arsénico a lo largo de la vida puede incrementar el riesgo de contraer cáncer de órganos internos como la vejiga, los pulmones y el hígado. Algunos de los efectos no cancerosos de la exposición de los seres humanos al arsénico son la decoloración y engrosamiento de la piel, enfermedades cardiovasculares y gastrointestinales y gangrena".

Certificado de Industria Limpia emitido por Profepa

De acuerdo con Carlos Alberto Silva, Carrizal Mining tiene desde hace varios años un Certificado de Industria Limpia por parte de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente.

Desde el mes de abril este diario en por lo menos nueve ocasiones ha solicitado a Lucero López, encargada desde diciembre del despacho de delegada de Profepa en Hidalgo, una entrevista para saber los criterios que se usaron para otorgar el Certificado de Industria Limpia a Carrizal Mining, pero la funcionaria ha argumentado que eso le corresponde a las oficinas centrales y que en breve se comunicarán con este diario para dar su versión de los hechos.

La minera busca que vecinos firmen documento

En tanto, el pasado 26 de mayo autoridades y vecinos de la localidad de El Mezquite I denunciaron que Mireya Aguiar Durán, gerente de administración de riesgos de la minera Carrizal Mining, pretendió obligarlos a firmar un documento en el que aseguraban no haber hecho declaraciones a La Jornada sobre la presunta contaminación del arroyo que atraviesa su comunidad por jales mineros.

Germán Andrade Cervantes y Martín Sánchez, delegado y subdelegado de El Mezquite I, junto con vecinos de la localidad, revelaron en entrevista con este diario que Mireya Aguiar Duran, a través de un empleado de la minera de nombre Gilberto Rojo, los citó a una reunión urgente para el día 16 de mayo en las oficinas administrativas de Carrizal Mining localizadas en el Exhacienda La Llave de la cabecera municipal de Zimapan.

"No nos dijo para que era la reunión, sílo que era urgente", comentó Germán Andrade.

A pesar de la insistencia de Mireya Aguiar de que Germán Andrade y Martin Sánchez fueran solos a la reunión, los delegados de El Mezquite I pidieron a otros pobladores que lo acompañaran, "ya que yo no me mando solo, y no quería que la demás gente de mi pueblo pensara que estaba yo tratando de llegar a acuerdos con la empresa. Por eso informé a la comunidad y les pedí que me acompañaran", explicó Andrade.

El día de la reunión realizada en las instalaciones de la Exhacienda La Llave donde se encuentras las oficinas de Carrizal Mining, Mireya Aguiar, sin ningún rodeo y en presencia de cerca de 20 pobladores, le pidió a Germán Andrade le firmara un documento en el que "decía que no habíamos sido entrevistados ni mencionado nada sobre la contaminación al periódico".

No obstante, "me negué a hacerlo, en primer lugar, porque sí dimos la entrevista, y en segundo lugar, porque yo no puedo tomar ninguna decisión por cuenta propia si no me lo autoriza la comunidad en una asamblea".

Mireya Aguiar, filmada en un video durante la reunión, dirigiéndose primero a Germán Andrade Cervantes, delegado de El Mezquite I, y luego a los vecinos de la localidad, le dice que la empresa necesita que firme una carta donde se deslinda de sus declaraciones a este diario en torno a la presunta contaminación del arroyo.

“Está saliendo en el periódico un artículo donde mencionan tu nombre, no de la comunidad, están diciendo que Germán está diciendo cosas negativas de la empresa; entonces yo le pedí que viniera porque Gilberto ya platicó contigo y tú le dijiste no haber dicho nada de eso; entonces lo que necesitamos es que de parte firmes un documento de parte de él en que conste que no lo has dicho”.

Pese al tono de regañó utilizado por Mireya Aguar, los delegados de El Mezquite I se negaron a firmar el documento.

Finalmente, bajo el argumento de que se trata de desechos sólidos provenientes de los cerros, Carrizal Mining contrató a un grupo de vecinos de El Mezquite I para que limpien el arroyo, el cual en varios tramos esta llenó de lodo grisáceo y del que Germán Andrade Cervantes sospecha pueden ser jales provenientes de la mina.