Ocotepec, Cuernavaca, Morelos.- Vecinos de Ocotepec se ven en la necesidad de comprar pipas, ante la indiferencia de las autoridades.

El vaciado de agua del pozo La Noria, en Ocotepec ha provocado que varios vecinos dejen de pagar el servicio al Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC) para gastar en garrafones y pipas, cuando sus posibilidades económicas se los permite.

En días pasados, el titular de la Comisión Estatal del Agua (Ceagua), Juan Carlos Valencia Vargas, informó que, desafortunadamente, las pruebas que han realizado, junto con la Comisión para la Prevención Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC), han confirmado la presencia de contaminación por hidrocarburos, lo que ha requerido la suspensión de esta fuente abastecimiento.

En un recorrido realizado por El Sol de Cuernavaca, se comprobó que continúa vaciándose el agua del pozo y se percibe un fuerte olor a gasolina proveniente del recurso.

Pedro Morales Balderas, vecino de la calle Vicente Guerrero, señaló que van dos semanas, durante el día y la noche, que se está tirando el agua, la cual aseguraron que está contaminada con gasolina.

Debido a la situación, los habitantes se vieron en la necesidad de comprar garrafones de agua, “porque esta agua no puede ni consumir, para ningún uso”, explicó.

Morales Balderas, compra al menos dos garrafones diarios, con un valor de 12 pesos cada uno, y aseguró que el Sapac no les ha enviado pipas de agua.

Valentina Ortiz, habitante de Ocotepec, explicó que este problema comenzó en junio y, desafortunadamente, muchos de sus vecinos la consumen porque no tienen para comprar garrafones o pipas de agua.

Asimismo, comentó que al principio el SAPAC les llevaba pipas de agua, pero dejaron de hacerlo desde hace tres meses; incluso, Valentina Ortiz se vio en la necesidad de acudir al Sapac y pedir que le cancelaran el servicio porque no iba a seguir pagando por un agua contaminada.

“De hecho yo fui a Conagua, les lleve una muestra, ellos me dijeron que el problema es que la gente no se queja”, señaló.

La vecina aseveró que la población está muy desinformada, pero al menos, en su caso, no ha tenido afectaciones en su salud por el agua contaminada.

Por otra parte, Damián, vendedor de frutas, indicó que ese problema tiene tiempo atrás, y que muchos han culpado a los huachicoleros, no obstante, él atribuye el problema a las autoridades locales por no brindar servicios de calidad; afirmó que no tiene caso quejarse, puesto que las autoridades nunca hacen nada.

Finalmente, por parte de la Ceagua, se informó que el 9 de enero la dependencia tomó muestras del agua, pero todavía se encuentran a la espera de los resultados.